
Texto: Eduardo Gordaliza
La consejera de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, María González Corral, lleva poco más de un año en su cargo, pero parece que lleva una década. Quizá sea por su interminable agenda o por su facilidad para atender todos los compromisos y los cientos de entrevistas que solicitan los medios de comunicación. Su consejería representa a todas la Comunidades Autónomas en los Consejos de ministros de Agricultura en uno de los momentos más críticos, la elaboración la nueva PAC 28-34, con la premisa de menos fondos. Hay partido y por trabajo no será.
Más de un año al frente de esta macroconsejería. Ya sabe que el agricultor se queja por naturaleza. ¿Cómo ve el horizonte a medio plazo en el campo de Castilla y León?
No creo que el agricultor se queje por naturaleza. Debemos ser conscientes de que gestionar un negocio al aire libre implica asumir más riesgos de los que ya afronta cualquier otro emprendedor. Trabajar rodeado de incertidumbres no es sencillo, por eso, desde aquí traslado mi reconocimiento a una profesión esencial.
Dicho esto, soy optimista para el futuro. Y lo digo porque nos encontramos en una transformación tecnológica que hace más atractiva la profesión de agricultores y ganaderos.
Miren, en este curso, en los ocho centros de FP agraria que gestionamos desde la Consejería, hay matriculados 761 alumnos, son un 28% más que hace cinco años. En las facultades crecen los universitarios que se forman en grados vinculados a la actividad agraria. Creo que todos estamos de acuerdo en que estamos ante un sector estratégico para la sociedad porque hablamos nada más y nada menos que de la alimentación, por tanto, es lógico pensar que es un sector con futuro. El reto, para lo que trabajamos cada día, es que de ese futuro se beneficie nuestro medio rural. Así que rotundamente sí: la agricultura moderna que se practica en la actualidad, y en la que Castilla y León es ejemplo de profesionalidad, tiene un enorme presente y futuro.
¿Qué es lo que más le preocupa de la futura PAC 2028-34?
Debemos puntualizar que los conocemos de la futura PAC post 27 es una propuesta que, como hemos dicho, no nos gusta. Nos preocupa especialmente su pérdida de identidad. Aunque se ha asignado un importe mínimo garantizado, se diluye en el conjunto de las políticas de la Unión y pierde su carácter prioritario. También me preocupa la creación de desigualdades en el seno de la propia Unión porque se puede generar competencia entre productores. Algunas medidas que deberían ser homogéneas para todos los productores serán cofinanciadas, esto quiere decir que si un Estado programa mayor apoyo público a un sector, los productores de ese Estado disfrutarán de una ventaja competitiva frente a los de otro que proporcione un apoyo menor. En resumen, desigualdades entre agricultores europeos.
Me preocupa la desaparición de los fondos agrarios, en especial el segundo pilar por el protagonismo que otorgaba a las políticas propias de cada una de las comunidades autónomas. Y lo más preocupante, la asignación presupuestaria, pues sufre un descenso considerable frente a la del marco 2021-2027.
Es un recorte inadmisible. Puedo ser consciente de las necesidades de la Unión Europea y de la situación geopolítica mundial, pero mi prioridad son los agricultores y ganaderos de Castilla y León y la seguridad alimentaria de sus habitantes. No debemos olvidar que la seguridad de un territorio comienza precisamente por la alimentación.
-Todo es sector está en contra de la nueva PAC, hasta el ministerio de Agricultura. ¿Cree que el presidente Sánchez apretará el botón rojo para vetarlo?
Poder puede. Otra cosa es que realmente el Gobierno de España se muestre en contra de esta PAC. Nosotros desde Castilla y León, desde la Junta, lo tenemos claro. No nos gusta este planteamiento en el que no se mantienen los dos pilares y en el que, previsiblemente, hay un recorte de los presupuestos. Esto lo hemos trasladado al Ministerio y a la Comisión Europea de forma unánime, no solo desde la Junta de Castilla y León, también han firmado con nosotros las Opas, Urcacyl, las comunidades de regantes…, todo el sector se niega a este documento preliminar y desde el Gobierno de España se tiene, a través de ese Consejo de los estados miembros, la posibilidad de vetar este documento y que se vuelva a replantear.

¿Qué margen de maniobra tiene la Junta de Castilla y León en las decisiones que se están tomando?
Desde la Junta de Castilla y León hemos activado todos los mecanismos en nuestra mano para presionar y hacer llevar nuestra posición y propuestas a las instituciones europeas. Lo primero que hicimos fue firmar, ya en el mes de mayo, una declaración institucional con las organizaciones profesionales a la que se han ido uniendo URCACyL, la asociación de la industria alimentaria VITARTIS, los regantes de Ferduero, ocho de las nueve diputaciones provinciales y otras entidades y cooperativas del sector, entre ellas ACOR, por lo que traslado desde aquí mi agradecimiento. Por tanto, tenemos un documento con la posición nítida de Castilla y León que ya hemos traslado a la Comisión Europea, a la Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo y al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Nuestra opinión es importante por nuestro peso en el sector agrario así que Europa debe escuchar atentamente a comunidades como Castilla y León.
– ¿Cómo cree que va a quedar el sector de la remolacha en la futura PAC?
Bueno, inicialmente y con los documentos que tenemos ahora mismo encima de la mesa, parece ser que se mantendrían esas ayudas asociadas donde está dentro la remolacha. Desde luego que también es muy importante aquí el sector. Cómo se comporta el sector de aquí a los próximos años, si se mantienen las hectáreas de remolacha que tenemos hasta ahora, si se mantiene el trabajo, si se sigue generando actividad económica, porque eso nos dará pie a todas las administraciones a seguir defendiendo este cultivo como un cultivo estratégico. Se permite incluir cultivos que tengan dificultades o que supongan ventajas agroambientales o sociales y, en este sentido, la remolacha cumplió esos requisitos en el actual marco y esperemos que lo siga cumpliendo en el próximo.
–Desde ACOR, y con las últimas noticias del sector, creemos que hay un divorcio entre el sector azucarero y el sector remolachero. ¿Cómo lo ven desde la consejería?
Desde la Consejería no somos partidarios de distintos eslabones no engarzados, ni de guerras entre los distintos eslabones. Siempre defendemos que la forma en que cualquier producto sea rentable es que todos los eslabones de la cadena ganen. En ese sentido, es importante que los remolacheros tengan la confianza de que tienen una industria de transformación por detrás que pueda permitir esa estabilidad a corto, a medio y a largo plazo. Yo lo que desde aquí sí que traslado es que pueden contar con la Junta de Castilla y León, que les trasladamos ese sosiego, esa tranquilidad que tiene nuestras puertas abiertas y que vamos a seguir defendiéndolo. Yo he trasladado al ministro de Agricultura la necesidad que hay de apostar por este cultivo estratégico para Castilla y León y espero que el resto de las administraciones también lo apoyen de igual manera que lo hacemos desde la Junta de Castilla y León.
“Con los documentos que tenemos ahora mismo encima de la mesa, parece ser que se mantendrían esas ayudas asociadas donde está dentro la remolacha”
– ¿Le preocupa que pueda desaparecer el cultivo de la remolacha?
La remolacha tiene algo que es fundamental en ese cultivo remolachero y es que es un cultivo que tiene ventajas agronómicas, tiene ventajas sociales, genera mucha actividad empresarial allí donde se siembra, genera muchos puestos de trabajo y por eso es muy importante apoyarlo. La apuesta de la Junta ha sido clara. Nos encontramos aquí, donde vemos esta parcela de regadío, y tenemos una cosa clara desde la Junta, que es apostar por esos nuevos regadíos, por esas modernizaciones de regadíos, que van tan asociados a esa rotación de cultivos donde la remolacha juega un papel fundamental. En esta legislatura hemos destinado más de 350 millones a los regadíos y, desde luego, que vamos a seguir haciéndolo porque en ese cambio, en ese camino, la remolacha juega un papel muy importante.
– ¿Qué le va a decir al comisario de Agricultura de la Unión Europa cuando visite Castilla y León?
Nuestra posición sobre la propuesta de la PAC ya la conoce. Esta reflejada en esa importante declaración institucional de la que hemos hablado antes y que ya le hemos trasladado. Lo que nos gustaría realmente es que conociese de primera mano la realidad de Castilla y León, una comunidad que cuenta con un sector profesionalizado que debe atenderse en la próxima PAC.
Queremos mostrarle nuestro modelo profesional para hablar de aspectos como la modernización del regadío, con cultivos como la remolacha donde nuestros agricultores obtienen rendimientos muy superiores a la media europea.
– Estamos en el año internacional de la Cooperativas. ¿Cuál es el apoyo que reciben estas entidades desde su consejería?

Desde la Junta de Castilla y León tenemos muy en cuenta a las cooperativas por su importancia económica, su papel social y su contribución al desarrollo rural. Más de 36.000 agricultores y ganaderos están asociados a alguna de las 545 cooperativas que existen en la Comunidad. De hecho 4 de las 10 principales cooperativas de primer grado a nivel nacional están radicadas en Castilla y León, ACOR una de ellas. A nadie se le escapa que la gran mayoría de las cooperativas lleva a cabo su actividad en pequeños municipios y que, precisamente, esa actividad no se deslocaliza.
Para apoyar este modelo de éxito, comprometido con el entorno, que facilita la gestión de las explotaciones a los profesionales y les ayuda a comercializar sus productos, asegurando unos ingresos básicos, desde el Gobierno de Alfonso Fernández Mañueco estamos ejecutando el IV Plan Estratégico del Cooperativismo 2024-2027.
Para nosotros, el sector cooperativo es estratégico. Contamos con sus representantes antes de adoptar decisiones que les afecten y un claro ejemplo de ello es su adhesión a la declaración institucional relativa a la PAC post 27.
– Vamos con un tema que conoce muy bien. ¿Cómo valora la gestión de la CHD en la Cuenca del Duero?
Lo hemos dicho en varias ocasiones, estamos en desacuerdo con la gestión del agua que realiza la Confederación Hidrográfica del Duero, algo que arrastramos desde hace años, en especial desde que se aprobó sin consenso el Plan Hidrológico 2022-2027, que contó con nuestro voto en contra y el de los representantes de los regantes, porque consideramos que no atiende a las necesidades reales de agricultores y ganaderos.
Desde la Junta hemos exigido a la Confederación que al menos cumpla con los pocos compromisos adquiridos en el plan, como las balsas de La Rial y Los Morales (León) que, sin embargo, ya han dicho que no piensan ejecutar.
Tenemos una capacidad insuficiente de regulación de los recursos hídricos para responder a las demandas agrícolas. Faltan nuevas infraestructuras hidráulicas que permitan un mejor aprovechamiento, especialmente en años secos, ya que solo tenemos capacidad para retener el 30% de las aportaciones medias anuales, muy por debajo del Tajo (90%) o el Guadalquivir (114%).
“Desde la Junta de Castilla y León tenemos muy en cuenta a las cooperativas por su importancia económica, su papel social y su contribución al desarrollo rural”
– Castilla y León lleva retraso en la ejecución de nuevos regadíos y en la modernización de los existentes ¿Cuál cree que es el motivo?
Desde la creación del ITACyL se han modernizado más de 125.000 hectáreas en Castilla y León y se han trasformado de secano a regadío más de 65.000 hectáreas. La Consejería tiene una apuesta firme por el impulso del regadío en Castilla y León. Esta legislatura hemos cumplido con el compromiso de iniciar actuaciones de modernización o transformación en 30.000 nuevas hectáreas.
Y sí, llevamos un retraso considerable en la ejecución de actuaciones de modernización aprobadas hace tiempo con proyectos que están pendientes de las declaraciones de impacto ambiental por parte del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO). or las comunidades de regantes a la espera de que el Gobierno de España habilite más recursos, ya sea mediante el aumento del capital social de SEIASA o a través de otros instrumentos de financiación.
Venimos reclamando desde hace tiempo la convocatoria de la Comisión Técnica de La Armuña con el objetivo de impulsar la puesta en marcha de las 12.000 nuevas hectáreas de regadío contempladas en el Plan Hidrológico. Esta actuación permitirá, en parte, sustituir regadíos actualmente abastecidos con aguas subterráneas, contribuyendo así a la mejora y recuperación de los acuíferos de la zona.
– ¿Hay algún plan para el mantenimiento de los regadíos de aguas subterráneas?
Consideramos que existen restricciones excesivas al uso de aguas subterráneas, que afectan a muchas explotaciones dependientes de los acuíferos, unas 160.000 hectáreas de las más de 550.000 hectáreas que hay en Castilla y León. Para Castilla y León, la gestión del agua es fundamental y debemos pensar también en el futuro de los usuarios de aguas subterráneas.
Para garantizar la actividad de estos regadíos en el futuro, planteamos incrementos de regulación que alivien determinadas zonas como ocurre en la Armuña, o como se planteó con la presa de Bernardos en el río Eresma, donde se sustituían los regadíos con aguas subterráneas en la zona de los arenales, los denominados regadíos meridionales que se contemplaban en los anteriores planes hidrológicos y que se han descartado por completo al anularse la presa.
También se están llevando a cabo estudios en dos Comunidades de Usuarios de Aguas Subterráneas (CUAS) con el objetivo de analizar su posible modernización, garantizando en todo momento la viabilidad económica de las actuaciones y la máxima eficiencia en el uso del agua de riego.
– ¿Llegamos tarde con el relevo generacional en el campo?
En todos los ámbitos de la sociedad estamos inmersos en un proceso de profesionalización, tecnificación y digitalización, también en la agricultura y la ganadería. Como he dicho, creo que será una herramienta muy útil para que los jóvenes miren al sector como una alternativa real donde desarrollar un proyecto de vida.
Debemos ser optimistas. Le hablaba al principio de un incremento del 28% de los alumnos que se forman en los centros de FP. La última convocatoria de ayudas de incorporación de jóvenes y de modernización, que ha contado con 100 millones de presupuesto, ha recibido numerosas solicitudes de jóvenes interesados por el sector. Con las ayudas de sucesión de explotaciones, en las que Castilla y león ha sido pionera, hemos sido capaces de transferir en esta legislatura 150 explotaciones de agricultores y ganaderos que se jubilan a otro más joven.
La Comisión Europea acaba de publicar la nueva Estrategia de relevo generacional en la agricultura que aspira a tener un 24% de jóvenes agricultores en 2040.
– La última ¿Es usted futbolera o sólo desde que Tierra de Sabor patrocina a la Selección Española?
Lo soy, especialmente en lo que respecta a la Selección que, en estos momentos, ha conseguido un seguimiento y un sentimiento de pertenencia por parte de los aficionados cuando menos similar al que logró en la época dorada de las dos Eurocopas y el Mundial. Pero ahora no voy a negar que lo seré más, porque estoy convencida de que el acuerdo de patrocinio al que hemos llegado supondrá un antes y un después para Tierra de Sabor y, por tanto, para los más de 6.000 productos bajo la marca de garantía.
Esperemos que los productos de calidad de Tierra de Sabor, como ‘Despensa Oficial de la Selección’, sirvan para que nuestros jugadores se mantengan en lo más alto y sigan dándonos las alegrías de los últimos tiempos.